Consiste en la generación de energía
eléctrica por medio de fuentes
renovables como el sol, el viento, el agua, entre otras; destinadas para el
autoconsumo y la posibilidad de inyectar eventuales excedentes a la red pública de
distribución.
Tanto hogares como PyMEs podrán optar por esta medida, a los
fines de lograr un ahorro en la factura del servicio eléctrico y contribuir de
esta forma a la mitigación del cambio climático.